Por fin libre de todas las obligaciones. el dómingo por la tarde dejamos el velódromo para disfrutar de un paseo tranquilo por el monte… .
Seguimos la huellas de Alberto y su partida ( ver a continuación)que por el paso de Audas han entrado al barranco del Belonseiche aunque nos quedamos a la entrada del bosque porque el calor ha convertido el» esquí de travesía» en» esquí de pesacadería.»
Un buena merienda con la compañía lejana de unos Sarrios y un águila real que se acerca al olor del «salmón del Pirineo» que trae Juan.
Subimos por la arista norte del pico que hay entre el Escalar y Belonseiche para hacer coma en el Belonseiche y a las 17:30 volver a Candanchu.
[slideshow]